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Afirma que ha sido excluido de La Moncloa para que “no haya nadie en el Consejo de Ministros que diga verdades incmodas o que presione al Gobierno por la izquierda”
Apenas unos minutos despus de que concluyera la intervencin de Pedro Snchez en la que ha detallado la composicin de su nuevo Gobierno, Podemos ha iniciado su labor de oposicin. Lo ha hecho tildando de “lamentable” la continuidad de Fernando Grande-Marlaska y Margarita Robles como responsables, respectivamente, de las carteras de Interior y Defensa.
“Esto pone de manifiesto que gana el ala ms conservadora del Gobierno y aventura que pocas transformaciones progresistas se van a dar en la prxima legislatura”, ha destacado Pablo Fernndez, uno de los portavoces de la formacin, que ha criticado tambin que se haya quedado fuera de La Moncloa: “Es un grave error, muy mala noticia para Espaa, porque limita cuando no cercena las posibilidades de transformaciones profundas y cambios reales que precisa nuestro pas”.
Para saber ms
Segn el partido que lidera Ione Belarra, la explicacin a que Snchez y Yolanda Daz los hayan “echado” del nuevo Ejecutivo de coalicin es para que “el PSOE est cmodo, que no haya nadie en el Consejo de Ministros que diga verdades incmodas o que presione por la izquierda”. Y ponen un ejemplo: “Que Espaa, como presidenta de turno de la Unin Europea, debe hacer mucho ms para parar el genocidio en Palestina rompiendo relaciones con Israel o decretando el embargo de armas”.
“Es reseable la diferencia entre la conformacin del Gobierno de 2020 y el actual. En 2020 ese Gobierno de coalicin gener una ilusin y unas expectativas que luego se vieron traducidas en una legislatura muy fructfera en la que, gracias a Podemos, se consigui ampliar derechos y lograr avances sociales inditos hasta ese momento”, ha sealado Fernndez en una rueda de prensa convocada este lunes. “El Gobierno que se conforma ahora mismo parece ser que nicamente se conforma con que no gobiernen las derechas sin ir ms all”, ha agregado.
En la formacin morada sostienen que el recin reelegido presidente y el PSOE no han querido “nunca” que sus representantes se sienten en el Consejo de Ministros, “hasta el punto de que en 2019 llegaron a repetirse las elecciones”: “nicamente entramos cuando no les qued ms remedio. Y ahora hemos visto lo mismo. Pedro Snchez no nos quera y ha tenido en Yolanda Daz a la colaboradora necesaria para expulsarnos”.
“Nosotros siempre hemos mostrado nuestra voluntad y nuestra intencin de seguir formando parte del Gobierno para ser motor de esos cambios y esas transformaciones que necesita nuestro pas, como lo hemos sido en la pasada legislatura, en la que Podemos ha sido quien ha impulsado las medidas ms ambiciosas, las que han logrado ampliar y conquistar nuevos derechos”, ha detallado su portavoz.
Sobre el ofrecimiento de Sumar para que fuera Nacho lvarez, hasta el viernes miembro de la direccin del partido morado, su representante en la coalicin, en el equipo de Belarra lo consideran “una treta” que “se califica por s sola”. A lo que apostillan: “Fue una maniobra bastante burda y la razn es clara”.
Carta a la militancia
En una carta enviada este mismo lunes a la militancia, Belarra ha incidido en ese papel de oposicin acusando directamente a Daz y a Snchez de tener “como objetivo evidente la sustitucin de Podemos por otra fuerza poltica que pueda representar simblicamente a la izquierda, pero que acepte la subordinacin al PSOE y la concertacin con los poderes econmicos y mediticos; es decir, que sea, a diferencia de Podemos, servil ante los poderes fcticos que sostenan y an sostienen al rgimen bipartidista y, por lo tanto funcional, a sus intereses”.
La secretaria general del partido culpabiliza a la vicepresidenta de haber construido “un nuevo partido poltico unipersonal, eliminando as el espacio poltico que haba conseguido por primera vez en 80 aos romper la clusula de exclusin histrica que impeda a la izquierda transformadora acceder al Gobierno”; de “imponer” a la candidata de IU en Andaluca; de “renunciar” a hacer campaa por Unidas Podemos en las elecciones autonmicas y municipales de mayo para, “gracias al mal resultado, tener ms poder negociador” en la confluencia de fuerzas que se presentaron juntas a las generales; de “vetar” a Irene Montero; y de despreciarlos como interlocutores polticos.
“Han querido acabar con nosotros, pero no han podido y lo nico que han conseguido es hacernos ms fuertes (…). Desde este momento nos ponemos a trabajar para recuperar un Gobierno en el que no slo mande Snchez y para que transformar este pas sea la mxima prioridad del bloque democrtico”, concluye Belarra.
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