El candidato del PP a la Generalitat apela al voto til para “garantizar el cambio” en el gobierno autonmico

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Si el 28-M alumbra un cambio poltico y de ciclo electoral en la Comunidad Valenciana, ser con PP y Vox en la ecuacin. Es lo que apuntan todas las encuestas, a pesar de que el presidente del PP valenciano y candidato a la Generalitat, Carlos Mazn, esquiva de momento pblicamente un escenario de pacto de gobierno con el partido de Santiago Abascal. Sin embargo, Mazn le pone en todo caso condiciones para sentarse a negociar.

As lo hizo ayer en un encuentro informativo con EL MUNDO, donde insisti en su idea de “gobernar en solitario con una mayora suficiente”. Es decir, aun con un ejecutivo monocolor y en minora… y el apoyo externo de Vox en las Cortes Valencianas. Una opcin que viene barajando en las ltimas semanas, sobre todo a raz de la ruptura por las bravas con Vox de la presidenta madrilea, Isabel Daz Ayuso.

Mazn ha entrado as en la precampaa marcando distancias con Vox, apelando incluso al voto til cuando todos los sondeos pronostican adems la debacle -y desaparicin- de Ciudadanos: “Cul es el nico partido que garantiza el cambio en la Comunidad Valenciana, que ms se parece a los valencianos y que puede vencer a Pedro Snchez?”, se pregunt ayer en la capital madrilea.

Aunque eludi responder a la pregunta de si Gnova tendr la ltima palabra en un hipottico pacto postelectoral –Alberto Nez Feijo estaba entre los asistentes-, Mazn quiso marcar perfil propio y dejar claros sus “lmites”. En este sentido, admiti que si tocase sentarse a negociar con Vox -partidario por ejemplo de recentralizar competencias-, las condiciones que debera aceptar este partido seran “el respeto al Estatuto de autonoma valenciano y la defensa de nuestra identidad”. El candidato del PP, que incluso apel a la lucha contra el cambio climtico, se declar “autonomista y valencianista”.

Recuper, de hecho, la promesa de una ley de seas de identidad como la que aprob el ltimo gobierno del PP con Alberto Fabra, y que fue una de las primeras normas que derog el Gobierno tripartito de Ximo Puig. “Por derecho histrico, la Senyera es la nica bandera que no se inclina ante nadie”, afirm Mazn, al tiempo que critic al Consell de Puig por regar con hasta 10 millones de euros las entidades consideradas catalanistas. La norma, de hecho, la concibe el PP en contraposicin a los llamados ‘Pasos Catalans’ que, segn Mazn, articulan la poltica cultural e identitaria del actual tripartito valenciano.

“Mi identidad no es separatista ni peligrosa”, dej claro Mazn, que asegur sentirse “muy espaol y muy valenciano”. Y, trasladado esto al plano educativo, el aspirante popular se apunt al “bilingismo cordial” de Feijo, para asegurar que las familias podrn escoger libremente una enseanza en castellano, pero tambin en valenciano.

Segn Mazn, lo que se decidir en las prximas elecciones de mayo -que para el PP son prcticamente un plebiscito a Pedro Snchez- es simple: “Continuidad y conformismo o el cambio social y poltico que ya solo lidera el PP”.