El impulso del presidente del Gobierno, Pedro Snchez, de introducir medidas para tratar de controlar la difusin de la desinformacin tiene su reflejo en otros lderes europeos que tras ser vctimas en sus pases -incluso a veces en primera persona- de los efectos de bulos y fake news han tratado de atajar un fenmeno que pone en juego derechos fundamentales y cuya complejidad se agrava con las nuevas posibilidades que abre el desarrollo de la Inteligencia Artificial.

El presidente francs, Emmanuel Macron, ha sido bastante combativo contra los bulos y puso en marcha mecanismos para frenarlos, sin mucho xito. En 2018, nada ms ser elegido, anunci una ley para luchar contra las fake news, tras, dijo, ser vctima de bulos en la campaa de las presidenciales que le llevaron al Elseo en 2017. La ley contempl mecanismos de transparencia para las plataformas digitales, para poder saber, por ejemplo, quin est detrs de los contenidos patrocinados. Se vot en 2018, pero apenas se ha aplicado. Sobre el papel, la norma, que se aplica al mbito digital, obliga a las webs y a las redes sociales a tomar medidas y tener herramientas para denunciar las falsas informaciones en periodos electorales. El consejo superior audiovisual galo (CSA) tambin puede suspender una emisin, por ejemplo, si considera que el contenido est influenciado por un estado extranjero. Sin embargo, la mayora de expertos reconocen que este tipo de medidas es difcilmente aplicable porque, para poder censurar una informacin falsa, el juez debe probar que esta es deliberada, artificial y con un alcance masivo. En la balanza, an, pesa ms la libertad de informacin y de opinin.

De cara a las elecciones de 2022, Macron instaur una comisin independiente para reflexionar sobre el impacto de la revolucin digital en la sociedad y la democracia y en 2023 impuls lo que bautiz como los estados generales de la informacin. Lo presiden el presidente de la cadena Arte y el secretario general de Reporteros sin Fronteras y es un espacio de debate para sentar las bases de un modelo digital para las generaciones futuras. Pretende proteger la informacin libre e independiente. A Macron le preocupa ms la contaminacin externa (Rusia) que la interna.

Hace poco, en la BBC, dijo que la libertad de expresin tiene sus lmites. Su esposa, Brigitte Macron, fue vctima de un bulo antes de las presidenciales de 2022, en las que fue reelegido, se difundi que era transgnero y haba nacido hombre.

El clima poltico en Alemania se ha enrarecido hasta el punto de que slo en 2023 se registraron 2.790 denuncias de ataques de distinto tipo a representantes pblicos, segn el Bundestag. La cifra dada no habla de la motivacin de las agresiones, aunque hubiera sido fcil atribuirlas al presunto fango de mentiras y calumnias creado por los medios y las redes sociales.

Mientras, los ataques o coacciones a la prensa en Alemania desde la poltica se pagan con dimisiones y la mas sonada fue la jefe del Estado, Christian Wulff, por ocultar un prstamo, segn desvel el tabloide Bild. Tras una casi interminable de reportajes y comentarios sobre la injerencia en la libertad de prensa, los viajes de vacaciones a las fincas de amigos de negocios y el libre uso de los coches, Wulff, siempre manteniendo su inocencia, dimiti finalmente. Lo mismo sucedi con ministros y ministras sealados por la prensa por plagiar tesis doctorales, antes incluso de las respectivas universidades revisaran sus trabajos.

La desinformacin es una calle de doble direccin y el trfico lo regula la Carta Magna porque la mxima prioridad en la lucha contra la desinformacin es la proteccin de la libertad de expresin y, por tanto, tambin del principio de neutralidad del Estado. La regulacin de la desinformacin, cuyo objetivo es permitir una formacin de opinin libre e independiente, no puede imponerse con medidas estatales, afirma el catedrtico Tobias Schmid, director de la Autoridad de Medios de Comunicacin de Renania del Norte-Westfalia y Representante Europeo de las Autoridades de Medios de Comunicacin.

El profesor Wolfgang Schulz, del Instituto Leibniz de Investigacin de Medios, opina lo mismo: La gobernanza de la desinformacin es compleja. En un Estado de Derecho no hay soluciones sencillas porque el Estado slo puede atribuir consecuencias a la falsedad de una declaracin o una noticia si un rgano independiente -como un tribunal- lo ha verificado.

2024, ao electoral en el Reino Unido, arranc con la noticia de los 143 vdeos fake de Rishi Sunak, que llegaron a 400.000 pinchazos en Facebook y que haban sido elaborados desde 23 pases, de Estados Unidos a Filipinas, segn una investigacin de la compaa Fenimore Harper. Meses antes, el lder laborista, Keir Starmer, fue vctima de una grabacin falsa en la que abroncaba a su personal electoral y que se viraliz en las redes. El alcalde de Londres, Sadiq Khan, tambin fue objetivo de un audio generado por Inteligencia Artificial (IA) donde deca que le importaba una mierda el Da del Armisticio, coincidiendo con una manifestacin pro-Palestina. Y la campaa de las municipales del 2 de mayo se vio marcada por la desinformacin sobre la zona de ultrabajas emisiones.

Tenemos que asegurarnos de que el peligro para la democracia que suponen los deep fakes y la desinformacin con IA es contrarrestado con la accin directa, ha declarado el ex secretario de Justicia Robert Buckland, que impuls la Ley de Seguridad Online (2023), que exige retirar noticias falsas en plataformas digitales.

El premier Rishi Sunak anunci en noviembre la creacin del Instituto de Seguridad de la IA. Y el Departamento de Ciencia, Innovacin y Tecnologa ha creado la Defending Democracy Taskforce, fuerza de choque para responder a amenazas contra el proceso democrtico.

No obstante, Jessica Zurcker, directora de la Ofcom (organismo regulador de las comunicaciones), reconoci recientemente en el Parlamento que no existe una solucin milagrosa y que la nica manera de combatir la desinformacin es con un enfoque multifactico, pidiendo responsabilidad a los gigantes de tecnologa y campaas de alfabetismo digital.

La Oficina del Comisario de la Informacin ha abordado tambin el asunto para calibrar qu leyes de proteccin de datos pueden aplicarse a la IA y cmo restringir el uso de datos biomtricos (voz, rasgos fsicos…) podran emplearse contra los autores de deepfakes.